N° Inventario: 099

Nombre: Küpulwe

 

Nombre en español: Cuna

 

Material: Madera/ lana/cuero

Dimensiones:
Largo total:  70 cm.
Ancho total: 26,5 cm.

 

Descripción

Cuna tradicional mapuche. Consiste en una armazón de madera cubierta con un cuero de cordero, con amarras de cuero o textil para sostener al bebé.

 

Antecedentes culturales 

Me crié en el küpulwe, mi mamá nos crió a mí y a mis tres hermanos. Me dijeron que me tenían amarrado siempre, me dejaban ahí, mientras mi mami hacía sus cosas. Acá tenemos un küpulwe está hecho de madera y también un cuerito, para dar suavidad. 

Se usaba porque tenía varios aportes en el desarrollo de las guaguas, que la espalda de la guagua sea firme y derecha, dando solidez a la espalda. (Relato de J.H, Tres Cerros).

Fuentes históricas

“ Voy a describir ahora la cuna de nuestra raza: La cuna se compone de varias tablillas, puestas en forma de canoa; las dos tablillas laterales quedan más largas, de manera que sobresalen en el extremo superior e inferior de la cuna; tiene patas, se dice. También se pone una estera de paja o un

pellejo, que se arregla como colchón y que se llama cheno. Además, se hace una cinta ancha, llamada iren, la cual se une por costura con las dos tablillas laterales perforadas para este fin; el

uren está atado a las tablas laterales de ambos lados hacia el extremo inferior y tiene ojales; además se hace una faja, una trenza, un arco y el tirador del arco. Cuando todo está listo, se coloca la guagua en la cuna; allí se le hace cama con

pañales y trapos. Además, se da a la estera una vuelta hacia arriba por encima de los pies del niño […] La cuna con la guagua queda asrirnada a la pared de la casa. El niño que está parado en su cuna puede ver a su madre y a todas las personas que trajinan por la casa, con eso se sosiega. Si tiene sueño se le pone en su cuna sobre el catre y luego duerme profundamente. En el caso que llore se le tira por encima del suelo en su cuna, arrastrando la cuna sobre sus patas inferiores.

Con eso suele callarse el niño, si no se tranquiliza, lo toma la madre junto con la cuna y le da el pecho”. (Pascual Coña 1943: 186- 188).